lunes, 21 de noviembre de 2016

Instrumental, de James Rhodes


La Humanidad ha sido siempre capaz de lo mejor y de lo peor, y esta autobiografía del pianista James Rhodes nos muestra dos buenos ejemplos. En ella es protagonista una de las más sublimes creaciones humanas: la música. Pero no menos protagonista es uno de los actos más despreciables que cabe imaginar: la violación de un niño.

James Rhodes sufrió violaciones y abusos sexuales desde los 5 hasta los 10 años. Al parecer, de manera increíble, nadie se dio cuenta. Tratar de entender, aunque sea mínimamente, lo que eso puede suponer para un niño es quedarse siempre corto, salvo que se haya pasado por una situación similar. Mucho menos nos podríamos permitir juzgar los desórdenes que en la vida de esa persona haya provocado un trauma infantil tan atroz.

El autor, en esta biografía, nos explica las múltiples consecuencias que aquellos hechos aberrantes han tenido en su vida. Daños que, según él mismo confiesa, nunca se superan del todo. En especial, llama la atención que él, la víctima, diga que tiene sentimientos de culpabilidad: he aquí uno de los muchos estigmas que dejan los abusos.

En el caso de James Rhodes, la música le salvó la vida. Lo dice una persona que intentó suicidarse varias veces y que se autolesionaba con cuchillas de afeitar. La música, el piano, la "Chaconne" de Bach, Beethoven, Chopin... y también su hijo, su mujer (cuando escribió el libro). Pero sobre todo, la música.

Hoy en día, James Rhodes es un concertista de piano famoso por tratar de despojar a la música clásica de la capa de elitismo que la rodea. En sus conciertos, se viste de manera informal, cómoda. Habla con el público, explica las obras, las circunstancias en que fueron compuestas por sus autores.

En Instrumental cada capítulo tiene una pequeña introducción en la que James Rhodes habla de un compositor y propone una obra suya para escuchar al tiempo que se lee el capítulo. Un verdadero deleite.

Por otra parte, es un libro que te despierta el interés en buscar información de compositores y obras, de conciertos, de entrevistas, de programas de TV y vídeos en los que aparece James Rhodes...

En definitiva, hay que agradecer al autor la valentía de escribir su historia. A muchas personas que sufrieron violaciones igual que él, les ha ayudado. Y a todos nos ha acercado un poco más a la maravilla que es la música clásica.


En el siguiente vídeo, James Rhodes interpreta la Chaconne en re menor, de Johann Sebastian Bach, en la versión para piano de Ferruccio Busoni. La obra que, según James Rhodes, le salvó la vida:





1 comentario:

Diente de león タンポポ dijo...

Gracias, Antonio, por esta maravillosa entrada. Estoy desconectada del club pero sigo estos post con ilusión. Me apunto el libro para cuando pueda leerlo, porque a través de este post me ha surgido mucho interés por el libro.

Qué original que cada capítulo vaya con su música.

Y la música del vídeo, sublime.

Un abrazo. Toñi.